POSICIONAMIENTO DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE ENFERMERÍA NEFROLÓGICA ANTE LA VACUNACIÓN DEL SARS-COV-2

POSICIONAMIENTO DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE ENFERMERÍA NEFROLÓGICA ANTE LA VACUNACIÓN DEL SARS-COV-2

COMUNICADO SEDEN

La situación actual a nivel mundial originada por la expansión descontrolada de la pandemia causada por el coronavirus (SARS-CoV-2), ha generado cerca de dos millones de muertes y más de noventa millones de casos registrados de infección.

Un año después de su irrupción, no existe un tratamiento que haya alcanzado una eficacia clínicamente significativa.

Las únicas medidas que han resultado realmente eficaces, han sido aquellas orientadas al estricto aislamiento de la población, con las consecuencias socioeconómicas que dicha situación conlleva.

La cronicidad, la fragilidad y las comorbilidades que acompañan al paciente renal, hacen que los riesgos de contraer la infección sean muy elevados y los datos registrados así lo avalan. Por otro lado, el personal de enfermería de nuestras unidades ha asumido un papel relevante en la primera línea de la lucha contra la infección desde el inicio de la pandemia y, por tanto, el riesgo y el contagio real han sido y son en la actualidad enormemente preocupantes.

Ante esta situación, la comunidad científica ha centrado su esfuerzo en la prevención de la enfermedad, mediante el uso de vacunas.

Los organismos responsables han aprobado (y de hecho, en nuestro país ha comenzado), la vacunación de la población con la vacuna basada en el ARN mensajero.

Desde nuestra Sociedad, consideramos necesaria la vacunación de la población de forma extendida, para alcanzar así la ansiada “inmunidad de rebaño”.

La primera línea de actuación profesional aludida previamente, hace que consideremos que todos y cada uno de los profesionales de la enfermería nefrológica en España, y los propios pacientes renales, han de ser vacunados de forma prioritaria.

En este momento, la responsabilidad social de todos los profesionales sanitarios vuelve a ser crucial. Un porcentaje elevado de la población, nos utilizará como espejo a la hora de decidir o no su vacunación.

La seguridad y eficacia de la vacuna están ampliamente avaladas por los organismos de regulación de fármacos y por los resultados del gran número de dosis administradas en fases previas.

La vacunación no solo tiene como objetivo principal la inmunidad del propio individuo, sino también la protección de todos los que nos rodean.

Ya ha comenzado el calendario vacunal en nuestro entorno y muchos de nosotros ya hemos sido vacunados. Esperamos que pronto seamos todos.

Con todo lo anteriormente expuesto, desde la Sociedad Española de Enfermería Nefrológica pedimos al personal sanitario que, una vez más, vuelva a ser el ejemplo que nuestra población necesita.

Cuidaos para poder seguir cuidando.